La falta de lluvia que, desde el año 1333, se padecía en la zona de Manresa, hacía que las cosechas de cereales no fueran suficientes para abastecer la ciudad, lo que conllevaba hambres, empobrecimiento y, como consecuencia directa, mortandades y despoblación. 
La solución que encontraron los consejeros de la ciudad fue la de hacer una acequia que llevara agua del Llobregat hasta el término de Manresa. Para hacerlo, era necesario el permiso del rey, y recursos económicos para la realización de I'ambiciós proyecto, lo cual se obtuvo afio 1339.
Con la fiesta de la Misteriosa Luz se recuerda el milagro que, según la tradición, el 21 de febrero de 1345 puso fin al conflicto entre la ciudad y el obispo para la construcción de la acequia. Finalmente, para dar más validez a I'acord, se pidió, y obtuvo, la confirmación papal de la concordia.(Marcos Torres Serra)
También este año estuvieron invitados al medieval de Manresa los Templarios de Puigreig, los cuales nos invitaron a nosotros a celebrar la fiesta con ellos.
Y como en el año anterior allí estuvimos, además con nuestro caballero Francesc esta vez de Rey, ya que participaba con un taller de manualidades para los críos, que dicho sea de paso, siempre lo tenía lleno. Nosotros hicímos el desfile con la comitiva del Bisba, al igual que el año anterior al terminar, nos tomamos nuestra hidromiel que nos estaba esperando fresquita... en la misma taverna del año anterior.
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